Bombardeo israelí deja al menos 15 palestinos muertos en hospital de Gaza

Al menos 15 palestinos murieron y decenas resultaron heridas en un bombardeo israelí al hospital Al Yamin Al Sayed en Yabalia, Gaza, según la Defensa Civil gazatí. Este hospital servía de refugio para miles de personas. Los ataques israelíes continúan alrededor de hospitales en el norte de Gaza, sometidos a órdenes de evacuación. Paralelamente, 16 gazatíes, incluyendo una familia de nueve, murieron en otros ataques, elevando el total de fallecidos a cerca de 42,000 desde el inicio del conflicto. Decenas de cuerpos permanecen esparcidos en Yabalia, donde el cerco militar por parte de tanques israelíes complica la situación de 200,000 gazatíes. Se calcula que 130 soldados israelíes se han negado a continuar combatiendo debido a los riesgos para los 101 rehenes en Gaza. En Israel, continúan las marchas para exigir un acuerdo con Hamás respecto a los rehenes. Además, la cadena Al Jazeera reportó que su camarógrafo Ali al Attar resultó gravemente herido en un bombardeo. Desde el inicio de la guerra, 176 trabajadores de medios han fallecido según las autoridades gazatíes.

Jerusalén (EFE).- Al menos 15 palestinos murieron este miércoles en un bombardeo israelí contra el hospital Al Yamin Al Sayed de Yabalia, en el norte de Gaza, zona que en estos días sufre una intensa operación de las fuerzas armadas, un ataque que dejó también decenas de heridos, informó la Defensa Civil gazatí.El hospital Al Awda de Yabalia recibió 18 de los heridos del bombardeo, según comunicó a EFE su director en funciones, Mohamed Salha, quien asegura que el centro atacado servía de refugio para “miles” de palestinos.Las incursiones israelíes continuaron en los alrededores de los principales hospitales del norte de Gaza, el Kamal Adwan, el Indonesio, el Al Awda y el propio Al Yamin Al Sayed, sometidos todos a órdenes de evacuación y donde esta mañana los hospitalizados superaban los 300, entre ellos 80 en cuidados intensivos.

Por EFE

Al menos 16 gazatíes fallecieron en la madrugada de este miércoles, entre ellos una familia de nueve miembros, en ataques israelíes en el norte y centro de la Franja de Gaza, donde los muertos rozan ya los 42.000 muertos desde el inicio de la guerra.

Según sanitarios de los equipos de emergencias de la Media Luna Roja Palestina, la familia fue masacrada en un bombardeo contra dos casas, próximas al mercado local, en el barrio de Shujaiya, al este de ciudad de Gaza.

Mientas, en el área central del campamento de refugiados de Nuseirat, los sanitarios confirmaron haber recuperado tres cuerpos sin vida, entre ellos el de un niño, en otro ataque de un caza contra una residencia.

Además, en las primeras horas del amanecer, otras cuatro personas murieron, entre ellos un niño, en un bombardeo sobre el campamento de Al Bureij (centro), área que el Ejército israelí ordenó evacuar hace cuatro días debido a los crecientes ataques.

Las incursiones israelíes continuaron en los alrededores del Hospital Kamal Adwan, en el norte de la Franja, al que ayer el Ejército israelí dio este miércoles como fecha límite para la evacuación forzosa tanto de pacientes como del personal médico.

“Con un lenguaje amenazante (…) nos informaron de manera oficial de que tenemos que evacuar el hospital en 24 horas de todos los heridos y los enfermos y de todo el personal médico”, dijo ayer su director, Husam Abu Safieh, a varios medios.

Además, fuentes locales informan de la presencia de decenas de cuerpos esparcidos por las calles en el campamento de Yabalia (norte), en medio de una escalada de bombardeos de artillería y una incursión con tanques que mantiene cercada la ciudad homónima.

La situación de unos 200.000 gazatíes en este campamento, muchos de ellos desplazados allí siguiendo órdenes de evacuación del Ejército de Israel, no deja de complicarse debido a los ataques y al cerco militar al que está sometido por cuarto día consecutivo.

Tanques israelíes avanzan hacia el centro de Yabalia, en el norte de Gaza

“Las familias siguen atrapadas en el campamento de Yabalia, sin comida ni agua, sin trabajo de los servicios municipales y sin equipos humanitarios (presentes)”, dijo este miércoles a EFE una fuente palestina desde este área cercada militarmente.

También hoy se ha sabido que un total de 130 soldados del Ejército israelí se han negado a seguir combatiendo en Gaza, un año después del inicio de la guerra, al entender que los combates representan una “sentencia de muerte” para los 101 rehenes que siguen en el enclave palestino.

“Está claro que la continuación de la guerra en Gaza no solo retrasa el regreso de los rehenes sino que también pone en peligro sus vidas: muchos rehenes han muerto por los bombardeos de las FDI (fuerzas armadas), muchos más que los que han sido rescatados en operaciones militares”, detallan en una carta enviada a las autoridades israelíes.

Nosotros, que hemos servido y seguimos sirviendo con dedicación, arriesgando nuestras vidas, anunciamos que si el Gobierno (israelí) no cambia de rumbo inmediatamente y trabaja para lograr un acuerdo para traer a los rehenes a casa, no podremos seguir sirviendo”, continúa el texto.

Masivas marchas en todo Israel para pedir un acuerdo con Hamás sobre los rehenes

Sus palabras llegan dos días después del primer aniversario de los ataques de Hamás del 7 de octubre que dieron inicio a la guerra en Gaza, cuando 251 rehenes fueron secuestrados por miles de milicianos en territorio israelí, de los que 97 continúan retenidos en el enclave.

Por otra parte, el canal catarí Al Jazeera, que ha sido expulsado de Israel por el gobierno, aseguró que uno de sus camarógrafos en Gaza, Ali al Attar, de 27 años, está gravemente herido después de que un bombardeo israelí alcanzara el hospital de los Mártires de Al Aqsa, en el centro de la franja.

El joven camarógrafo fue alcanzado por metralla en la cabeza cuando se encontraba en el hospital, desde donde trabajaba ya que ahí disponía de electricidad.

Desde el inicio de la guerra hace un año 176 trabajadores de los medios han sido asesinados, según el Gobierno gazatí controlado por Hamás.