El papa Francisco promueve la paz en Asia-Pacífico en medio de conflictos religiosos.
El papa Francisco partió hacia Papúa Nueva Guinea para continuar su gira en Asia-Pacífico, tras finalizar una visita en Indonesia donde abogó por el diálogo con el islam y otras religiones.
El papa partió del aeropuerto Soekarno-Hatta de Yakarta pasadas las 10:30 hora local (3:30 GMT) en un avión de la compañía Garuda y tiene previsto llegar a Port Moresby, donde realizará la segunda parada en un país con cientos de grupos étnicos e idiomas y mayoritariamente cristiano. Francisco, de 87 años, ofició una misa para cerca de 60,000 fieles en el estadio Gelora Bung Karno, mientras otros 40,000 siguieron la ceremonia desde pantallas externas.
El papa, que va en silla de ruedas, celebró un evento interreligioso con el gran imán de Istiqlal, Nasaruddin Umar, y firmó una declaración que insta a resolver los conflictos y combatir la destrucción ambiental. Indonesia es el país con más musulmanes del mundo, con los católicos representando solo el 3.1% de sus 270 millones de habitantes.
En Papúa Nueva Guinea, será recibido con una ceremonia de bienvenida y la agenda oficial comenzará con encuentros con obispos y sacerdotes, y con niños acogidos por Cáritas. El domingo, se reunirá con el primer ministro James Marape y viajará a Vanimo para dialogar con misioneros católicos. Papúa Nueva Guinea cuenta con más de 840 idiomas y una población mayoritariamente cristiana, enfrentando pobreza y conflictos entre tribus.
El lunes, el papa Francisco continuará su gira en Timor Oriental y el miércoles en Singapur, concluyendo su viaje el 13 de septiembre tras recorrer más de 32,000 kilómetros.
Yakarta (EFE).- El papa Francisco partió hacia Papúa Nueva Guinea para continuar su gira en Asia-Pacífico, el viaje más largo en su papado, tras finalizar una visita en Indonesia donde abogó por el diálogo con el islam y otras religiones.
El papa partió del aeropuerto Soekarno-Hatta de Yakarta pasadas las 10:30 hora local (3:30 GMT) en un avión de la compañía indonesia Garuda y tiene previsto llegar seis horas más tarde a Port Moresby, donde realizará la segunda parada de la gira en un país con cientos de grupos étnicos e idiomas y mayoritariamente cristiano.
Francisco, de 87 años y que llegó el martes a Indonesia, ofició ayer una misa para cerca de 60.000 fieles que llenaron el estadio Gelora Bung Karno en Yakarta, mientras que otros 40.000 siguieron la ceremonia desde pantallas en otro estadio adyacente.
Previamente, el papa, que va en silla de ruedas debido a problemas de movilidad, celebró un evento interreligioso con el gran imán de la mezquita Istiqlal, Nasaruddin Umar, y firmó una declaración que insta a las religiosas a ayudar a resolver los conflictos y combatir la destrucción ambiental.
Indonesia es el país con más musulmanes del mundo y los católicos representan solo el 3,1 % de sus 270 millones de habitantes repartidos en 6.000 islas habitadas.
En Papúa Nueva Guinea, el pontífice será recibido en una ceremonia de bienvenida esta tarde, pero la agenda oficial comenzará el sábado con encuentros con obispos y sacerdotes del país y con niños acogidos por un colegio de secundaria dirigido por la ONG católica Cáritas.
El domingo, tiene previsto reunirse con el primer ministro papuano, James Marape, en Port Moresby y luego viajará a la remota y pequeña localidad de Vanimo, cerca de la frontera con Indonesia, donde dialogará con misioneros católicos.
Papúa Nueva Guinea, el país con más diversidad de idiomas -unas 840- y con 600 tribus, cuenta con 95,6 % de población de fe cristiana, de la que el 32 % es católica. Entre sus principales problemas se encuentran la pobreza, pese a ser un país rico en recursos naturales, y los enfrentamientos violentos entre tribus.
El lunes, el papa Francisco continuará su gira en Timor Oriental y el miércoles que viene proseguirá en Singapur su periplo que finaliza el 13 de septiembre tras más de 32.000 kilómetros recorridos, su viaje más largo.