La Organización de Estados Americanos (OEA) inició su 54 Asamblea General en Luque, Paraguay, abordando la situación en Bolivia, la crisis en Haití y la violencia regional.
Treinta y dos delegaciones asistieron a la primera sesión, donde el canciller paraguayo, Rubén Ramírez, fue elegido presidente de la Asamblea. Ramírez destacó la necesidad de seguridad y democracia en las Américas.
El presidente paraguayo, Santiago Peña, abogó por diálogo y tolerancia en la región, rechazando modelos únicos. La Asamblea condenó el intento de golpe de Estado en Bolivia contra el presidente Luis Arce, emitiendo una resolución que denuncia cualquier intento de desestabilización democrática. La resolución fue promovida por Chile y apoyada por varios países.
Héctor Arce, embajador de Bolivia ante la OEA, agradeció la condena internacional que ayudó a frenar la sublevación militar liderada por el ex comandante general del Ejército boliviano, Juan José Zuñiga, ahora detenido.
Luis Almagro, secretario general de la OEA, reiteró que los golpes de Estado no deben tener lugar en las Américas. La Asamblea votará 20 resoluciones y tres declaraciones hasta el viernes, y elegirá a miembros de organismos como la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Luque (Paraguay) (EFE).- La Organización de Estados Americanos (OEA) comenzó este jueves las sesiones de su 54 Asamblea General, con la situación en Bolivia, la prolongada crisis en Haití y la preocupación regional por la escalada de violencia entre sus temas en agenda.
Por EFE
Treinta y dos delegaciones de los miembros activos de la OEA acudieron en esta jornada a la ciudad paraguaya de Luque para la primera sesión de deliberaciones, que arrancó con la elección de la Presidencia de la Asamblea, que recayó en el canciller de Paraguay, Rubén Ramírez.
“En las Américas no hay espacio para el autoritarismo bajo ninguna excusa, tampoco debemos pretender un desarrollo efectivo sin garantías de seguridad”, dijo Ramírez en su discurso de apertura.
“Vivimos en una región de paz”, agregó el jefe de la diplomacia paraguaya, quien destacó que, a pesar de ello, existen “grandes desafíos” debido a la acción del crimen organizado transnacional.
De la sesión inaugural también participó el presidente de Paraguay, Santiago Peña, quien señaló en su intervención que “América no necesita uniformidad ni modelos únicos” sino “diálogo, respeto y tolerancia para construir consensos”.
La Asamblea General de la OEA condenó “enérgicamente” este jueves el intento de golpe de Estado contra el Gobierno del presidente de Bolivia, Luis Arce, y denunció cualquier “intento de desestabilizar las instituciones democráticas” en ese país.
En una resolución incluida de forma extraordinaria y aprobada por aclamación, las delegaciones del continente expresan su “grave preocupación” por lo ocurrido el miércoles.
La sublevación militar, agrega el texto, “constituye una amenaza al régimen constitucional del Estado Plurinacional de Bolivia y una flagrante insubordinación a las órdenes expresadas públicamente por el presidente constitucional, Luis Arce Catacora”.
El embajador de Bolivia ante la OEA, Héctor Arce, agradeció la aprobación del documento y dijo que el intento de sublevación militar fracasó, entre otros motivos, por la “fuerte condena internacional en cuestión de minutos”.
“Este hecho nos recuerda que el reto más importante para nuestros sistemas políticos es sin duda garantizar la preservación de la democracia representativa y encontrar la fórmula para que las interrupciones violentas a las democracias, sea por vía de golpes violentos o por vía de golpes oficiales de otra naturaleza, finalmente sean desterrados de nuestros países”, añadió Arce.
El pronunciamiento fue promovido ante el plenario por Chile e incluyó una “nota al pie” de El Salvador.
La resolución fue planteada por Antigua y Barbuda, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Uruguay, con el copatrocinio de las delegaciones de Canadá, Ecuador, Estados Unidos, Perú y Surinam.
El levantamiento militar en Bolivia, liderado por el ex comandante general del Ejército boliviano Juan José Zuñiga -ya detenido- generó que Antigua y Barbuda, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Uruguay, con el copatrocinio de las delegaciones de Canadá, Ecuador, Estados Unidos, Perú y Surinam, presentaran un proyecto de resolución sobre ‘Acciones contra la democracia en el Estado Plurinacional de Bolivia’.
La situación de Bolivia marcó la jornada previa y la ceremonia de inauguración de la Asamblea, en la que el secretario general de la OEA, Luis Almagro, reiteró que “los golpes de Estado, que han significado torturas, desapariciones forzadas, ejecuciones y asesinatos, no deben tener nunca más lugar en las Américas”.
Durante las sesiones plenarias, que se extenderán hasta este viernes, se someterán a votación 20 resoluciones y tres declaraciones y se elegirán los integrantes de distintos organismos del sistema, entre ellos de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.