Ryan Routh se declaró “no culpable” del intento de asesinato del expresidente Donald Trump durante una audiencia en una corte federal de Florida. Routh, de 58 años, enfrenta varios cargos, incluyendo intento de asesinato el 15 de septiembre en un campo de golf en Florida. La Fiscalía presentó una carta de Routh en la que detallaba su plan para matar a Trump y lamentaba no haberlo logrado.
También enfrenta cargos por delitos con armas. En la audiencia ante el juez Bruce E. Reihart, se informó a Routh de las posibles penas, incluida cadena perpetua si es declarado culpable. El gobernador Ron DeSantis ordenó una investigación estatal del incidente.
El Servicio Secreto avistó a Routh armado en el Trump International Golf Club, en West Palm Beach. Routh huyó cuando un agente le disparó, pero dejó el arma con sus huellas dactilares. Fue detenido más tarde por la policía local.
El FBI halló un rifle sin número de serie, mira telescópica, cámara digital, mochila y bolsa. Routh, con antecedentes criminales, escribió que se sentía culpable por elegir a Trump como presidente.
El fiscal general Merrick B. Garland condenó el intento de asesinato. Routh, ex trabajador de construcción, está detenido en el Centro Federal de Miami esperando juicio con un abogado de oficio.
Miami (EFE).- Ryan Routh se declaró este lunes “no culpable” del intento de asesinato del expresidente de EE.UU. y candidato republicano, Donald Trump (2017-2021), durante una audiencia en una corte federal del sureste de Florida.
Por EFE
Routh, de 58 años y a quien se le ha negado la libertad bajo fianza, enfrenta varios cargos, entre ellos el de intento de asesinato de Donald Trump el pasado 15 de septiembre en un campo de golf en Florida.
La semana pasada la Fiscalía dio a conocer una carta manuscrita de Routh en la que detallaba su plan de matar a Trump y lamentaba no haberlo logrado.
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Routh está acusado también de dos delitos relacionados con armas, incluida la eliminación del número de serie de un arma de fuego y posesión de un arma de fuego mientras era un delincuente convicto.
En la breve audiencia de tres minutos ante el juez Bruce E. Reihart, se le informó al acusado de los cargos y las posibles penas máximas.
De ser declarado culpable de intento de asesinato, Routh, que solicitó en la audiencia un juicio con jurado, se enfrenta a una pena de cadena perpetua.
Además, Routh podría enfrentar una acusación estatal. El gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, ordenó una investigación del incidente para que se considere una acusación.
El día de los hechos, Routh fue avistado por el Servicio Secreto, que lo descubrió armado con un rifle semiautomático escondido detrás de unos arbustos en el Trump International Golf Club, en West Palm Beach, propiedad del magnate, en momentos en que éste se hallaba con un grupo de amigos un hoyo atrás.
Routh huyó del lugar de los hechos sin abrir fuego cuando un agente le disparó después de ver su rifle asomando a través de una cerca, pero el acusado dejó el arma con sus huellas dactilares en el arma, según la Fiscalía.
Gracias a un aviso de un testigo ocular, a Routh lo detuvieron más tarde policías locales mientras conducía un vehículo rumbo al norte a través de una carretera interestatal 95.
Los agentes de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI, en inglés) hallaron después en el área un rifle cargado con el número de serie raspado e ilegible, así como una mira telescópica, una cámara digital, una mochila y una bolsa.
Routh, que en la actualidad residía en Hawai y cuenta con antecedentes criminales en otros estados, escribió que se sentía culpable de haber elegido a un presidente “que terminó siendo un estúpido”.
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“La violencia contra funcionarios públicos pone en peligro todo lo que representa nuestro país y el Departamento de Justicia utilizará todas las herramientas para responsabilizar a Routh” por el intento de asesinato de Trump, dijo la semana pasada en un comunicado el fiscal general de EE.UU., Merrick B. Garland.
Routh, que trabajaba en el sector de la construcción antes del incidente, se encuentra detenido en el Centro Federal de Miami mientras espera juicio y cuenta con la representación de un abogado de oficio de la Oficina del Defensor Público Federal.