Una serie de fenómenos meteorológicos afecta a gran parte de EE.UU. este fin de semana con olas de calor que amenazan a cerca de 100 millones de personas y alimentan incendios, además de emergencias por inundaciones y la posibilidad de un sistema tropical en el Golfo de México.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) indicó que es probable que se registren récords de temperaturas en el Valle de Ohio y el Atlántico medio. En Washington D.C., podrían alcanzar los 37°C (100°F) por primera vez desde 2016, con índices de calor que podrían llegar a 43°C (110°F) en el sur del Atlántico medio. Los altos niveles de calor persisten durante varios días, aumentando el estrés para quienes carecen de aire acondicionado confiable, según la NWS.
En el Valle Central de California, el calor extremo no ayuda a los bomberos que combaten el incendio en el condado de Colusa, que ha quemado casi 20,000 acres (8,300 hectáreas) y está contenido en un 35%, según Cal Fire.
En contraste, Iowa enfrenta lluvias y tormentas; la gobernadora Kim Reynolds proclamó un desastre para 21 condados por inundaciones catastróficas que obligaron a evacuar poblados como Rock Valley, con 4,200 habitantes. Dakota del Sur también ha sido afectada y se pronostican fuertes precipitaciones en los Grandes Lagos, el norte del Valle del Misisipi y partes del sur de Nueva Inglaterra.
El Centro Nacional de Huracanes advirtió sobre un posible sistema tropical que seguiría la trayectoria de Alberto a través del suroeste del Golfo de México hacia el noreste de México. Aunque no tan grande como Alberto, podría traer más lluvia al sur de Texas y provocar nuevas alertas de inundaciones a lo largo de la costa del Golfo.
Los Ángeles (EE.UU.) (EFE).- Una serie de fenómenos meteorológicos afecta a una gran parte de EE.UU. este fin de semana con olas de calor que amenazan a cerca de 100 millones de personas y sirve de combustible para incendios. A eso se suman emergencias por inundaciones y la posibilidad de un sistema tropical en el Golfo de México.
Por EFE
En su última actualización, el Servicio Meteorológico Nacional (NWS, en inglés) aseguró que “es probable que se registren récords” en temperaturas, incluidas partes del Valle de Ohio y el Atlántico medio.
Una alerta de calor está vigente en la capital estadounidense donde por primera vez desde 2016 podrían alcanzar los 37 grados Celsius (100 grados Fahrenheit).
El calor y la humedad extremos se combinarán para elevar el índice de calor (o la sensación de calor) siendo posibles 43 grados Celsius (110 grados Fahrenheit) en el sur del Atlántico medio.
Las altas temperaturas llegan a dos días de que comenzara oficialmente el verano con la probabilidad de persistir durante varios días, lo que “aumenta el nivel de estrés por calor para quienes no cuentan con un aire acondicionado confiable”, advirtió la NWS.
El pronóstico de altas temperaturas para el Valle Central de California no está ayudando a los bomberos que lidian con el incendio en el condado de Colusa, que ya ha quemado casi 20.000 acres (8.300 hectáreas) y está contenido en un 35 %, según datos del Departamento Forestal y de Protección contra Incendios de California (Cal Fire).
En contraste, otros estados del país están lidiando con lluvias y tormentas como en Iowa, donde este sábado la gobernadora Kim Reynolds emitió una proclamación de desastre para 21 condados en el noroeste del estado por inundaciones catastróficas, que obligaron a la evacuación de poblados enteros como Rock Valley con una población de 4.200 habitantes.
Las lluvias también han afectado a Dakota del Sur y la NWS pronóstico grandes probabilidades de fuertes precipitaciones a lo largo de los Grandes Lagos y el norte del Valle del Misisipi y en partes del sur de Nueva Inglaterra.
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En Nuevo México las temperaturas seguirán siendo altas, pero se mantendrán “condiciones monzónicas” en la región, lo que ha ayudado a los bomberos a lidiar con dos incendios que afectan al estado.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) de Estados Unidos advirtió que este fin de semana se podría desarrollar un sistema tropical que seguiría la trayectoria de Alberto a través del suroeste del Golfo de México y hacia el noreste de México.
Aunque no se espera que este sistema sea tan grande como Alberto, si podría traer más lluvia al sur de Texas y provocar nuevas alertas de inundaciones en esa zona y a lo largo de la costa del Golfo.