El abogado penalista y defensor de derechos humanos, Rafael Narváez, expresó que el ministro de transporte y tránsito terrestre debe hacer cumplir la ley, advirtiendo que la pasividad ante las infracciones promovería el peligro y pondría en riesgo la vida de los ciudadanos. Enfatizó que el derecho a la vida es un derecho humano universal que el Estado debe preservar.
Narváez recordó que la Ley de Transporte Terrestre prohíbe las motopiruetas en la vía pública, estipulando multas de 6.500 unidades tributarias para los infractores. Además, los conductores que comprometan la seguridad del tránsito podrían enfrentar revocación de licencia y procedimientos administrativos.
El abogado subrayó la gravedad de estos riesgos, especialmente considerando las deficiencias en los hospitales, que carecen de insumos, material médico quirúrgico y médicos traumatólogos suficientes para atender emergencias. Criticó al Estado por aprobar la práctica de motopiruetas como “deporte nacional”, exponiendo así a conductores, acompañantes y transeúntes a serios peligros.
Narváez insistió en que “lo más grave es que no todos los quirófanos funcionan al 100%”. Pidió al Estado revocar esta decisión para evitar consecuencias graves y promover la seguridad y la vida sin peligro.
“Tiene la palabra el ministro de transporte y tránsito terrestre para que haga cumplir la ley porque de lo contrario estaría convalidando delitos y promoviendo el peligro y riesgo de vida de la ciudadanía olvidando que el derecho a la vida es un derecho humano universal con obligación del Estado a preservarla”, expresó el abogado penalista y defensor DD HH .
El abogado recordó que la Ley de Transporte Terrestre prohíbe la práctica de las motopiruetas en la vía pública con multas de 6.500 unidades tributarias a quien infrinja la norma. Además, los conductores que pongan en peligro la seguridad del tránsito pueden ser sancionados con revocación de licencia y procedimientos administrativos.
Narváez aseguró que poner en riesgo la vida de estas personas es “muy grave” y más cuando los hospitales se encuentran en pésimas condiciones en cuanto a asistencia por falta de insumos, material médico quirúrgico y escasos médicos traumatólogos para atender las emergencias por los accidentes.
El exparlamentario, abogado y defensor por los derechos humanos, Rafael Narváez, consideró que el Estado, a través de la motopiruetas aprobadas como “deporte nacional”, pone en riesgo la vida de los conductores, sus acompañantes y transeúntes.
Por El Nacional
“Lo más grave es que no todos los quirófanos funcionan al 100%”, reprochó.
El exparlamentario exigió al Estado revocar está decisión a tiempo para evitar graves consecuencias que lamentar en la población e invitó al Estado a promover la seguridad personal y la vida sin peligro.