Las delegaciones del Gobierno de Colombia y la Segunda Marquetalia, disidencia de las FARC conformada por exguerrilleros que abandonaron el acuerdo de paz de 2016, instalaron formalmente este lunes la mesa de diálogo del primer ciclo de negociaciones de cinco días. En este periodo, se tratarán temas como el desescalamiento del conflicto y las condiciones para la convivencia pacífica.
Las delegaciones planean desarrollar, desde el martes hasta el sábado, los puntos específicos de la agenda de diálogo, definir los protocolos de negociación y anunciar las primeras medidas para avanzar en el desescalamiento del conflicto. Ambas partes expresaron su compromiso con la búsqueda de un acuerdo de paz e invitaron a la ciudadanía a participar de manera constructiva.
Han destacado la necesidad de una férrea cohesión y abstención de acciones que socaven la confianza mutua, comprometiéndose a acordar medidas para garantizar la seguridad de los participantes y las comunidades. También hicieron un llamado a la comunidad internacional para mantener la confianza en este proceso.
Venezuela, Cuba y Noruega, países garantes del diálogo, junto con la Conferencia Episcopal colombiana y el Representante Especial del Secretario General de Naciones Unidas, saludaron el inicio de las negociaciones y expresaron su compromiso con la paz en Colombia.
El diálogo se retoma tras la aprobación de la ‘ley de paz total’ que permite renegociar con quienes abandonaron el acuerdo. Armando Novoa dirigirá las negociaciones por parte del Gobierno, mientras que ‘Walter Mendoza’ lo hará por la Segunda Marquetalia.
La Segunda Marquetalia, creada en 2019 por ‘Iván Márquez’ y ‘Jesús Santrich’, cuenta con entre 1,800 y 2,000 integrantes. Su objetivo es el control territorial y mantienen un conflicto abierto con otra disidencia de las FARC, el Estado Mayor Central (EMC).
Caracas (EFE).- Las delegaciones del Gobierno de Colombia y la Segunda Marquetalia, disidencia de las FARC integrada por exguerrilleros que abandonaron el acuerdo de paz de 2016, instalaron “formalmente” este lunes la mesa de diálogo de paz del primer ciclo de negociaciones, que se prevé dure cinco días, en los que se abordará el desescalamiento del conflicto y las condiciones para la convivencia pacífica, entre otros asuntos.
Por EFE
Ambas delegaciones anunciaron que, a partir del martes y hasta el próximo sábado, tienen previsto desarrollar “los temas específicos de la agenda de diálogo de paz, definir los protocolos de la negociación y anunciar las primeras decisiones sobre medidas” para “contribuir a avanzar en el desescalamiento del conflicto”.
En una declaración conjunta, expresaron su compromiso con la “búsqueda de un acuerdo de paz para Colombia”, e invitaron al país andino a “hacer suyo y participar de este proceso de manera constructiva”.
A su juicio, “el éxito de la paz y los diálogos que se inician exigen una férrea cohesión de las partes en la ruta de la salida política y su voluntad de abstenerse de acciones que socaven la confianza mutua”, por lo que se comprometieron a “acordar, prioritariamente, las medidas necesarias para garantizar la vida y seguridad de quienes participan en el proceso y de las comunidades en general”.
Además, hicieron un llamado a “mantener la confianza de todo el país y de la comunidad internacional en los diálogos de paz”.
Venezuela, Cuba y Noruega, países garantes del diálogo entre el Gobierno de Colombia y la disidencia de las FARC Segunda Marquetalia, saludaron este lunes con “satisfacción” el inicio de las negociaciones entre ambas partes, lo que consideran “un paso importante para lograr la paz” en el país andino.
Los tres países, así como las instituciones acompañantes —la Conferencia Episcopal colombiana y el Representante Especial del Secretario General de Naciones Unidas—, agradecieron “la confianza depositada” en ellos y expresaron su “compromiso con el proceso que hoy inicia (en Caracas) y la construcción de la paz en Colombia”, según una declaración conjunta, leída por el monseñor Héctor Fabio Henao.
El diálogo se retoma después de que se aprobara la ‘ley de paz total’ en la nación andina, que pretende permitir la renegociación a quienes se salieron del acuerdo.
Por parte del Gobierno colombiano, los diálogos los va a dirigir el exmagistrado del Consejo Nacional Electoral Armando Novoa, quien participó en la Constituyente de 1991, y por la guerrilla, ‘Walter Mendoza’, un histórico jefe de las FARC que participó en la creación de las columnas móviles de esa guerrilla.
La Segunda Marquetalia, que toma el nombre del lugar donde nacieron las FARC en 1964, fue creada en 2019 cuando ‘Iván Márquez’ y otro de los negociadores del acuerdo, ‘Jesús Santrich’ (que murió en 2021 en un fuego cruzado en Venezuela) volvieron a la clandestinidad.
Es el grupo al que el Gobierno le ha dado status político más pequeño y se estima que tienen entre 1.800 y 2.000 hombres, de los cuales solo entre 1.200 y 1.300 son guerrilleros, el resto son colaboradores.
La intención de la Segunda Marquetalia no es atacar directamente al Estado, como otros grupos, sino conseguir el control territorial, para lo cual mantienen el conflicto abierto con la otra disidencia de las FARC, el Estado Mayor Central (EMC), según el Comité Internacional de la Cruz Roja.