¡España desafía a Maduro! ¿Corte de relaciones inminente?
Las relaciones entre España y Venezuela se han tensado más después de que la ministra de Defensa, Margarita Robles, calificara de dictadura la presidencia de Nicolás Maduro y criticara la limitación de derechos fundamentales en la oposición. Caracas ha convocado al embajador español, Ramón Santos, quien se reunió con el ministro de Exteriores venezolano, Yván Gil. Gil expresó que Venezuela no permitirá ninguna acción injerencista por parte de España y tomará medidas para proteger su soberanía.
Las tensiones comenzaron tras una proposición en el Congreso español para reconocer a Edmundo González como presidente legítimo de Venezuela. En respuesta, el Parlamento venezolano propuso cortar las relaciones con España.
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha calificado la convocatoria del embajador como “una decisión soberana” y aboga por la mejor relación posible con Venezuela. Por otro lado, Esteban González Pons, del PP, apoyó las palabras de Robles y criticó a Pedro Sánchez por su postura hacia Maduro. El PP ha registrado en el Senado una moción similar para el reconocimiento de Edmundo González.
Vox busca que el Congreso apruebe otra iniciativa para embargar bienes de los miembros del gobierno de Maduro en España. Sumar propone un diálogo entre el régimen de Maduro y la oposición para evitar el conflicto. Expresidentes Felipe González y Mariano Rajoy han mostrado su apoyo a Edmundo González, quien ha pedido asilo en Madrid tras afirmar que ganó las presidenciales, a pesar de que el resultado fue otorgado a Maduro.
El Parlamento venezolano instará al Gobierno a romper todas las relaciones con España, mientras Caracas sostiene que las actas publicadas por la oposición son falsas.
Madrid (EFE).- Las relaciones entre España y Venezuela se han tensado aún más después de que la ministra de Defensa, Margarita Robles, haya calificado de dictadura la presidencia de Nicolás Maduro y haya criticado la “limitación de derechos fundamentales” que sufre la oposición, lo que ha provocado que Caracas haya convocado al embajador español, Ramón Santos.
Santos se ha reunido este viernes con el ministro de Exteriores de Venezuela, Yván Gil, que le ha manifestado que su país no permitirá “ninguna acción injerencista por parte del Gobierno de España en asuntos que son de competencia exclusiva” y adoptará “las medidas necesarias, en el marco del derecho internacional y la diplomacia bolivariana de paz, para proteger su soberanía”.
Las relaciones diplomáticas entre ambos países comenzaron a tensarse esta semana después de que el Congreso aprobara el miércoles una proposición para instar al Gobierno a reconocer a Edmundo González como presidente legítimo de Venezuela, que fue presentada por el PP y recibió los apoyos de Vox, PNV, CC y UPN.
Esto provocó que el Parlamento venezolano aprobara a su vez una propuesta al Gobierno de Nicolás Maduro para que corte las relaciones diplomáticas, consulares, económicas y comerciales con España.
El propio ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha considerado la llamada al embajador como “una decisión soberana” y se ha mostrado partidario de tender puentes, al dejar claro que España responderá buscando “las mejores relaciones posibles” con el pueblo venezolano.
El vicesecretario de Institucional del PP, Esteban González Pons, ha aplaudido las palabras de Robles, ya que considera que calificar al Gobierno Maduro de dictadura “es la pura verdad”.
“Por primera vez alguien del Gobierno de Pedro Sánchez ha dicho la verdad”, ha asegurado y ha acusado a Sánchez de que “está poniendo paños calientes a los criminales”.
Entretanto, tras la votación exitosa en el Congreso, el PP ha registrado en el Senado una moción, que se votará la próxima semana, para el reconocimiento de Edmundo González como presidente legítimo de Venezuela, en una solicitud similar a la aprobada el miércoles.
Vox busca que se respalde también en el Congreso la próxima semana otra iniciativa sobre la situación en Venezuela.
En este caso, la formación que lidera Santiago Abascal ha registrado una proposición no de ley en la que pide al Gobierno el embargo de los bienes patrimoniales que tengan en España los miembros del Gobierno de Maduro y que se localice los de sus familiares o testaferros.
Sumar ha defendido abrir “un proceso de reconocimiento mutuo y de diálogo” entre el régimen de Maduro y la oposición en Venezuela para contribuir a una “solución democrática” y evitar que “escale el conflicto”, y acusan al PP de utilizar la crisis venezolana para atacar al Ejecutivo del que forman parte.
Los expresidentes Felipe González y Mariano Rajoy se han reunido este mismo viernes con Edmundo González para mostrarle su respaldo.
El socialista lo ha calificado como “presidente electo”, mientras que Rajoy ha trasladado al opositor venezolano el deseo de que la democracia “se instale en Venezuela con él como presidente del país”.
El opositor, que llegó a Madrid el domingo, pidió asilo debido a la “persecución” que dijo sufrir después de las presidenciales del 28 de julio, cuya victoria oficial fue otorgada por el Consejo Nacional Electoral (CNE) a Maduro, un resultado validado, posteriormente, por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
Sin embargo, la oposición insiste en que el vencedor fue González Urrutia, una afirmación que sustentó en el “83,5 % de las actas electorales” que asegura haber recabado mediante testigos y miembros de mesa el día de las votaciones, que -aseguró- otorgan la victoria al antichavista por un amplio margen.
