Los Chicago Bulls se convirtieron en uno de los equipos más icónicos del deporte mundial. De la mano de Michael Jordan, considerado como el mejor jugador de básquet de todos los tiempos, el equipo se hizo famoso de la mano de las inolvidables actuaciones del número 23, que los condujo a ganar sus primeros tres títulos de la NBA en 1991, 92 y 93.
Por Infobae
En las últimas horas, se dio a conocer que tres anillos de aquellas consagraciones, uno de cada campeonato, se subastaron por una suma cercana a los 300 mil dólares. Es decir, por cada una de las joyas se llegó a pagar casi 100.000 de la moneda estadounidense.
Según indicó el sitio Heritage Auctions, una casa de subastas multinacional ubicada en EEUU con sede en Dallas, los anillos que fueron subastados pertenecían a Horace Grant, uno de los bastiones de los Bulls en los comienzos de la década del 90. El ex ala-pivot, que hoy tiene 57 años, fue elegido por Chicago en la décima posición del Draft de 1987 y se mantuvo en el equipo hasta el 94, cuando fue a jugar al Orlando Magic.
A partir de la difusión de la noticia, los seguidores se preguntaron cómo era la situación económica de Grant para tener que vender sus anillos de campeón. Pero fue el medio TMZ el que confirmó que quien fuera compañero de Jordan y Pippen no está en bancarrota. Las joyas fueron entregadas años atrás por el propio Horace para fines benéficos y ya no les pertenecían al momento de entrar en la subasta que terminó el pasado sábado 27 de agosto.
Hay que recordar que además de ser campeón con los Bulls, Grant también fue parte del comienzo de la dinastía que se forjó en los Lakers de la mano de Phil Jackson, quien supo ser el entrenador de la época dorada en Chicago. El ex jugador de 2.08 metros de altura fue parte del plantel de la franquicia de Los Ángeles que se coronó campeón de la NBA en 2001 tras vencer en las finales a los Philadelphia 76ers gracias al dúo que conformaron Shaquille O’ Neal y Kobe Bryant.
Hace poco más de dos años, el ex compañero de Su Majestad había apuntado contra el histórico número 23 de Chicago luego de la aparición de la serie documental The Last Dance. El ala-pivot no ocultó su enojo contra MJ, quien lo acusó de ser el encargado de filtrar intimidades dentro del plantel y ser una de las principales fuentes del periodista Sam Smith, autor de The Jordan Rules, libro que bajó del pedestal al 23 al poner en el centro de la escena varios escándalos de apuestas y su comportamiento con el resto del equipo.
“Lo que dijo Jordan es mentira, completamente una mentira. Mentira, mentira, mentira”, afirmó el ex Seattle Supersonics y Los Angeles Lakers en declaraciones a ESPN Radio en Chicago y recogidas por CBS. Como si fuese poco, el ganador de 4 anillos de la NBA redobló la apuesta y le envió un claro mensaje al principal propietario de los Charlotte Hornets: “Si MJ me guardaba rencor, resolvámoslo como hombres. Hablemos de eso, o podemos resolverlo de otra manera”.
Con respecto a ser el topo de los Bulls, se defendió: “Saca esta mentira de que yo fui la fuente detrás de esto. Sam y yo siempre hemos sido grandes amigos, todavía somos buenos amigos. Pero por la santidad de ese vestuario, nunca pondría nada personal ahí fuera”, agregó.